Buscaglia: "El cartel de Sinaloa opera en Formosa, gracias a un pacto político de impunidad mafiosa"
El abogado y especialista en la lucha contra el crimen organizado Edgardo Buscaglia, expresó que el cartel de Sinaloa opera en Formosa y en el Chaco. A la vez que denunció los vínculos entre las mafias y la política, y un "pacto político de impunidad mafiosa" con los narctráficantes.

En la entrevista realizada por Eduardo Feinmann en el programa "Alguien tiene que decirlo", Buscaglia, cuestionó las medidas ejecutadas por el Estado argentino en la lucha contra el narcotráfico. El abogado especificó que, de las 45 acciones antimafia planteadas por la Ley Internacional de la Naciones Unidas, "Argentina la viola en el 97% de esas acciones".
En concordancia con lo planteado dentro de la entrevista, el especialista remarcó que hay cierta connivencia entre el narcotráfico y la política. "Está profundamente penetrado por la delincuencia organizada, las investigaciones periodísticas de German de los Santos y de Hugo Alconada en Rosario dan cuenta de esas infiltraciones en la política de todos los partidos desde hace años".
"Hemos venido señalando desde hace 12 años la infiltración de la delincuencia organizada trasnacional, el cartel de Sinaloa en Formosa, en el Chaco, en la provincia de Buenos Aires que es el centro patrimonial de la delincuencia organizada argentina, donde más dinero sucio se encuentra. Todas estas investigaciones de campo se basan en datos duros de causas judiciales argentinas y extranjeras", manifestó el experto.
En Chaco, Formosa y Buenos Aires desde hace muchos años está el Cartel de Sinaloa. Hubo una diputada que en el año 2011 denunció eso, llamada Pulgaring en el Chaco. Esto es algo que viene sucediendo desde hace años, estas son causas federales (lavado de dinero, trata de personas, tráfico de drogas, inmigrantes, medicinas adulteradas) que en Argentina están fuera de control y tienen responsabilidad federal.
Las cárceles son un palacio de la delincuencia organizada hoy en Argentina como lo eran en Brasil.
La situación va de mal en peor. Nunca en la historia argentina hubo una reforma judicial que incluyo al sistema penitenciario, jamás. Es el eslabón perdido del sistema judicial, lo primero que tenés que hacer es incluir al sistema penitenciario en una purga, una limpieza de sus autoridades.