El 25 de Mayo en una cancha de carrera: el gildismo secuestra la patria para hacer campaña
Lo que debería ser una conmemoración patriótica, abierta a todos los ciudadanos y con eje en los valores fundacionales de la Nación, terminó transformado —una vez más— en una puesta en escena partidaria al servicio del oficialismo formoseño.

En Las Lomitas, el gobierno provincial organizó el acto del 25 de mayo en una cancha de carreras de caballos, en lugar de realizarlo en un establecimiento educativo o en una plaza pública, como dicta la tradición republicana.
¿A quién se le rinde homenaje, a la patria, a los caballos o los burreros?
La convocatoria, difundida con fotografías del gobernador Gildo Insfrán, consignas políticas y estética electoral, incluía la invitación a toda la comunidad educativa —docentes, estudiantes y familias— a participar en un evento que, lejos de respetar el sentido cívico de la fecha, lo desvirtúa por completo al mezclarlo con actividades de tinte claramente proselitista.
Una maniobra oportunista y sin escrúpulos
La indignación en redes sociales no tardó en estallar. Padres, madres, docentes y vecinos manifestaron su repudio por el uso político del sistema educativo, denunciando que se obligó a escuelas a participar de una jornada en un ámbito impropio, sin la solemnidad ni el respeto que amerita el aniversario de la Revolución de Mayo.
"El acto más importante de la Argentina no puede realizarse en un potrero. ¡¿A quién se le rinde homenaje, a la patria o a los caballos?!", expresó con indignación una vecina lomitense en Facebook. Otros usuarios cuestionaron que el evento esté encabezado por candidatos desconocidos para los barrios, usando la estructura del Estado para promocionarse en plena campaña electoral.
El gildismo, una vez más, convierte lo institucional en propaganda
Lejos de ser un hecho aislado, esta utilización partidaria de una fecha patria se inscribe en la lógica que el gildismo viene profundizando desde hace años: cooptar cada espacio institucional para el beneficio de su maquinaria política. Lo que debiera unirnos como ciudadanos se convierte en otra trinchera partidaria, donde no hay lugar para la pluralidad ni el respeto por las formas democráticas.
La elección de una cancha de turf no es casual: busca garantizar control territorial, acceso restringido a la crítica y un armado escenográfico funcional al relato oficial. Pero el problema va más allá del lugar físico: es la manipulación simbólica de la identidad nacional para vaciarla de contenido y llenarla de consignas vacías al servicio del poder.
¿Dónde está el intendente?
Que opina el intendente local de este esquema del Modelo Formoseñp. ¿Acompaña esta degradación de los actos patrios o se inclina la tradición y la institucionalidad?.
Mientras tanto, Formosa sigue asistiendo al uso inescrupuloso de los recursos públicos, las instituciones educativas y las fechas históricas como herramientas de sometimiento político.
El 25 de mayo no les pertenece. La patria no es un afiche de campaña.