"Jorge Abel González es el peor acosador sexual del gobierno de Gildo Insfrán"

"Si no sos de ellos o no te acostás con algún jefe, si sos mujer, no accedés a la policía ni a los cargos públicos. Muchas funcionarias se han ido por el acoso", expresó la legisladora, apuntando directamente contra el ministro González y agregando que "hay un aparato político que opera para garantizar esos favores sexuales que exige el poder".
Denuncias silenciadas y justicia cooptada

Neme afirmó que muchas de las víctimas han sido orientadas desde organismos estatales —como la Secretaría de la Mujer o la Unidad de Asistencia a la Víctima— hacia la Fundación "Libela", donde trabajan Jesica Müller y un tal Arce, ambos —según la diputada— con "al menos tres denuncias de abuso desestimadas por una justicia funcional al poder político".

"Las psicólogas tratantes de estas chicas les sugieren que accedan a los pedidos sexuales del ministro para conservar sus cargos. Es una locura institucionalizada", denunció.

Complicidad política y encubrimiento

Neme arremetió también contra la candidata libertaria Jesica Müller, a quien acusó de ser una "gildista encubierta" y "cómplice del aparato de abuso y silencio que protege al ministro González". Según indicó, esta exfuncionaria opera dentro del esquema de encubrimiento a través de su rol en la fundación mencionada, que recibe derivaciones oficiales.

"En la policía provincial, muchas cadetes quedan afuera si no acceden a los favores sexuales. Esto no lo digo yo sola, lo dice la gente en la calle", aseguró, al tiempo que recordó episodios similares denunciados por estudiantes universitarias durante la visita de Sonia Sánchez, activista y sobreviviente de trata.

El rol de la Red Infancia Robada

Las denuncias, indicó Neme, han sido puestas en conocimiento de la Red Infancia Robada, organización que encabeza la hermana Marta Pelloni, con quien articulan acciones para intentar trasladar las causas fuera de la provincia y evitar la intervención del aparato político local en la protección de las víctimas.

"Pedimos que las denuncias se puedan judicializar en un ámbito neutral. Mientras la justicia siga cooptada por el poder, las víctimas están expuestas", advirtió.

Finalmente, Neme reveló que posee audios, testimonios y mensajes que comprometen a funcionarios y allegados al ministro González, y remarcó que por razones de seguridad jurídica no se han presentado aún todas las denuncias formalmente.

"No le vamos a entregar en bandeja la cabeza de las víctimas. Muchas de ellas ya presentan trastornos de personalidad producto de los abusos. Eso es psicología básica."

La impunidad como política de Estado

Con una justicia provincial controlada y un aparato político que niega sistemáticamente estas acusaciones, las denuncias de Gabriela Neme se transforman en una de las expresiones más crudas de la violencia estructural y la falta de garantías que sufren las mujeres en el Estado formoseño.

"En Formosa, las mujeres somos carne de cañón. Y por eso tenemos que levantar la voz", concluyó.