Carbajal cruzó a Montoya: "Si te confunden con los libertarios, es porque no tenés una posición clara"
El diputado nacional por la UCR, Fernando Carbajal, salió con dureza a cruzar a su correligionario Miguel Montoya, actual presidente del Comité Provincial del radicalismo, luego de que éste intentara justificar el vergonzoso 3,66% obtenido por el partido en las últimas elecciones provinciales.
Montoya —quien fue dos períodos concejal de la ciudad y dos veces diputado provincial por la UCR, recientemente reelecto— sorprendió al reconocer públicamente que "ni el farmacéutico de su barrio lo reconoce como radical", que "la gente se confundió", y que "estas elecciones no fueron sobre personas ni propuestas, sino sobre slogans".
Con una naturalidad llamativa, incluso contó que muchas personas lo felicitaron por el triunfo de Atilio Basualdo, el intendente libertario de Las Lomitas electo diputado nacional.
"Tal es la confusión —dijo Montoya— que hasta mi farmacéutico me felicitó por el triunfo de Basualdo".
"Si te felicitan por Basualdo, es porque no se entiende de qué lado estás"
Ante esas declaraciones, Fernando Carbajal no tardó en responder con una ironía cargada de definición política:
"Seguramente al presidente del Comité Provincial de la UCR lo habrán confundido y felicitado porque, cuando tu posición política no es clara y coqueteás con los libertarios, es posible que te confundan y te feliciten porque ganó Basualdo...".
El legislador nacional marcó la diferencia con una frase que resonó fuerte en el ámbito político formoseño:
"A mí nadie me confunde, ni me felicita, porque mi posición siempre fue clara: ni con Gildo Insfrán, ni con Milei, porque son las dos caras de una misma moneda".
Crisis interna y conducción desgastada
El cruce se produce en medio de una fuerte crisis interna en el radicalismo formoseño.
La actual conducción, impuesta por acuerdo de cúpula, cuestionada por su falta de legitimidad y renovación, lleva años sin convocar a internas partidarias reales y enfrenta reclamos de autocrítica y apertura democrática.
El clima se tensó aún más luego de que Enzo Casadei, frustrado candidato del equipo de Montoya y Naidenoff, amenazara con sanciones disciplinarias y expulsiones para los radicales que sospecha no lo acompañaron en las urnas, a quienes llegó a tildar de "traidores".
El reflejo de un radicalismo sin rumbo
Las palabras de Montoya dejaron en evidencia el desconcierto y la desconexión de la cúpula partidaria con la realidad de los formoseños.
Mientras los ciudadanos reclaman unidad, firmeza y oposición real al régimen de Insfrán, parte de la dirigencia radical -enquistada hace décadas en el sello partidario- parece más preocupada por buscar excusas que por reconstruir credibilidad.
Carbajal, en cambio, volvió a posicionarse claramente dentro del espacio patidario: diferenciándose de la conducción partidaria, sin ambigüedades, sin doble discurso y con una línea clara de oposición al poder provincial y al discurso libertario.