Beatriz Chaparro desnudó el maltrato en la Convención: "Rodrigo Vera es un mentiroso, difamador, maltratador y misógino"
La Convención Constituyente de Formosa volvió a protagonizar un escándalo institucional y político. Esta vez, la protagonista fue Beatriz Chaparro, reconocida trabajadora de la salud y gremialista combativa, quien tras jurar como convencional en reemplazo de Gabriela Neme, renunció en el mismo recinto luego de que se le negara el uso de la palabra y se descalificara su propuesta de reforma vinculada al sector sanitario.
"Cuando pretendí que se trate mi proyecto de salud, Rodrigo Vera lo calificó de ‘payasada’. Ahí entendí que no había nada que hacer en ese lugar: no me dejaron fundamentar y me negaron la palabra. Presenté mi renuncia y me fui", relató Chaparro.
"Nunca en mi vida me maltrataron tanto como este tipo"
En declaraciones a Radio Parque, Chaparro fue categórica al desmentir las acusaciones que el oficialista Rodrigo Vera lanzó en su contra una vez que se retiró del recinto. "Después dijeron por Canal 3 que yo había llegado en la camioneta de Gabriela Neme y que entré haciendo quilombo. Eso es una burda mentira. Vine caminando, todo el mundo me vio", aseguró.
Pero el cruce escaló aún más:
"Este tipo es un mentiroso, difamador, maltratador y misógino. Nunca nadie en mi vida me faltó tanto el respeto como él . Yo como sindicalista de la salud me enfrenté a ministros, llevé reclamos al doctor Gildo Insfrán y siempre me atendieron con respeto. Nunca nadie me gritó ni me insultó como lo hizo Vera en pleno recinto y en transmisión en vivo. Eso es maltrato de género", denunció.
El trasfondo de una renuncia forzada
Chaparro aclaró que su permanencia en la Convención duró apenas unos minutos porque el clima autoritario le dejó claro que su voz no sería escuchada: "Si ya sin leer mi proyecto lo trataron de payasada, menos iban a aceptar discutirlo. Yo quiero una Formosa libre, donde se pueda hablar y debatir, no vivir presionada bajo estas mentiras y agresiones".
La trabajadora de la salud recordó que, pese a sus posturas críticas, jamás había sido maltratada ni siquiera por el propio gobernador Insfrán:
"El doctor Gildo Insfrán sabe que yo soy contra, pero siempre me trató con respeto. Estos que se creen dueños del poder porque son hijos o sobrinos de, no saben lo que es trabajar. Lo de Vera a mí me llamó poderosamente la atención: si miente en esto, ¿qué se puede esperar de lo que escriban en esa Constitución?".
Una denuncia al corazón del poder
Chaparro concluyó con un mensaje demoledor:
"Ayer se iba a tratar el tema de la violencia y los derechos. Pero cómo voy a quedarme si la violencia está ahí adentro, y yo la sufrí en carne propia. No voy a ser cómplice de algo con lo que no estoy de acuerdo. Yo quiero una Formosa libre, donde no se maltrate a nadie por pensar distinto".